CRÓNICA | Toca remontar en el Gran Canaria (3-1).

Las Palmas realizó un mal partido en La Romareda, bajó los brazos igual que en el derbi contra el Tenerife cuando se puso por delante y lo acabó pagando caro, pero como hizo el Zaragoza hace menos de una semana y debe servir de ejemplo, en esto del fútbol todo puede pasar.

El equipo canario comenzó de una forma soberbia dominando y embotellando atrás al equipo blanquillo que se defendía como gato panza arriba y que el único peligro que tenían en sus botas eran regalos defensivos, que a la postre costó muy caro. El gol del equipo amarillo vino tras fallo de la defensa local, un robo de balón donde David Simón cayéndose cedió para Viera y este al primer toque batió a Bono. Después del gol, luces y sombras hasta que llegó el primer gol tras un fallo garrafal de la defensa y en cadena, donde no se prestó atención a una segunda jugada y donde Rico remató solo. Se llegaba al descanso con el empate a 1 y 45 minutos que darían para dos goles más.

El segundo tanto zaragocista llegaría tras otro fallo, una vez más Roque Mesa en esta temporada, pierde el balón por querer realizar una jugada personal con ventaja numérica, estando desmarcado solo Araujo tras un buen desmarque y Jonathan Viera al otro lado, en la contra, fulminante tras esta pérdida infantil de balón supuso el 2-1 donde Raúl Lizoain no llegaba tapó mal a William José y en el pase atrás metió Pedro a puerta vacía.

Pero como a perro flaco todos son pulgas, el tercero volvió a llegar en un nuevo fallo defensivo, donde entraron de forma blanda y con excesiva permisividad al galdense Javi Álamo, que centró a nadie pero Raúl Lizoain desvió de forma muy defectuosa nuevamente dejando el balón muerto para que rematara a placer William José.

La desesperación, los nervios y las pocas ideas terminaron de hundir a una UD Las Palmas que hasta el gol maño mostró su cara y luego bajó los brazos y su estado anímico y mostró la cruz.

La renta de dos goles de desventaja deberá culminar en remontada y con el ansiado ascenso, recordar que solo vale la victoria y debe ser como mínimo de 2-0, una renta distinta de dos goles quitando el 3-1 que serviría para una hipotética prórroga no servirían a los de Herrera.

Miguel Yánez. @miguelyanez22.